Comentario
En la isla de Mallorca se conoce la existencia de unos recintos de planta aproximadamente cuadrada, cerrados por un muro y con puerta de acceso en uno de sus lados, que en ocasiones presentan una columna central y en otras pilares para sostener la posible techumbre y que, a juzgar por los hallazgos registrados, también pueden interpretarse como edificios de uso religioso. El más conocido, por las magníficas cabezas de toro en bronce que se conservan actualmente en el Museo Arqueológico Nacional, es el de Costitx. Según la descripción que del hallazgo se hizo y de acuerdo con el croquis que ha llegado hasta nuestros días, Costitx podría ser un recinto rectangular cerrado por muros en cuyo interior había trece pilares monolíticos de un metro de altura por término medio, aparentemente colocados sin ningún orden. El suelo, sobre el que aparecieron los objetos, estaba ocupado por un elevado número de fragmentos cerámicos y algunos recipientes completos, así como abundantes huesos de animales, básicamente bóvidos, cápridos y cerdos, junto a cuernos de machos cabríos y colmillos de cerdos, y algún hueso de cráneo humano. Un buen ejemplo de esta clase de construcciones es la denominada Son Oms A, cerca de Palma de Mallorca. Se trata de un recinto rectangular, con seis pilares en el interior dispuestos ordenadamente en hileras de tres, hecho con muros de paramento arcaizante, a base de grandes piedras, pero utilizado con toda seguridad hasta época de Claudio-Nerón.
Una variante, por su planta de tendencia a proporciones cuadradas, es el santuario absidal de Son Marí, donde también en su interior aparecieron varios pilares, al parecer colocados en hiladas, al menos en la situada más al oeste, que es la que se conserva. Tiene su puerta de acceso al sur, frente a la pared absidal, y su paralelismo con los recintos de taula resulta evidente. Similares son también algunas cámaras funerarias de S'Illot des Porros, en Ca'n Picafort, por lo que parece posible pensar en una cierta tendencia a esas plantas en edificios sacralizados. En Els Antigors de Ses Salines la excavación proporcionó una interesante información acerca del carácter del edificio: todo su suelo estaba ocupado por una capa de cenizas mezcladas con huesos de animales, que también rellenaban algunos vasos colocados junto a las paredes y dispuestos sobre unos tamborcillos. Tanto la presencia de cenizas, que denotan la existencia de fuegos rituales a los que se arrojaban ofrendas de animales troceados, como la colocación de vasos cerámicos en torno a las paredes del recinto coincide con la manera de ofrendar en las taulas.
Otros ejemplos se documentan en el poblado de Almallutx (Escorca), donde se excavaron dos santuarios en el interior del propio poblado y un tercero en la ladera contraria del valle. Los tres presentan la variante de su gran pilastra trilítica levantada en el centro aproximado del recinto, frente a la puerta de ingreso. La planta de los santuarios de Almallutx es prácticamente cuadrada, pero en los dos situados en el interior del poblado las esquinas de las paredes internas posteriores aparecen redondeadas, reflejo quizá de lo que en otros casos es el muro absidal. Sobre el suelo de uno de ellos se encontraron vasos, en algunos casos cubiertos con tapaderas rústicas, que contenían en su interior huesos troceados de ovejas y, en menor cantidad, de cerdos, cabras y bueyes. Aparecieron además dos enterramientos, uno masculino y otro femenino, colocados en el suelo y realizados aprovechando unas ranuras naturales de la roca.
Algunos casos más confirman la existencia de santuarios de este mismo tipo en otros poblados. Así, las dos construcciones enfrentadas de S'Illot, en Sant Lloren, una de las cuales tiene indicios de haber acogido también una pilastra central al estilo de Almallutx o la de Son Mas, en Valldemossa. Un caso particular es Sa Roca Rotja de Sóller, una estructura próxima a las anteriores, aunque de proporciones más reducidas. La aparición de unas estatuillas de bronce lo pone en relación con otros posibles santuarios de tipología constructiva irregular, como son los de Son Favar o Ca'n Amer.